España contribuye a la lucha internacional contra el uso de cebos envenenados en el campo

  • El veneno no conoce fronteras y causa estragos en todos los países. SEO/BirdLife ha acudido a la reunión del primer Grupo de Trabajo internacional sobre envenenamiento de especies migratorias celebrado en Túnez los días 27 y 28 de mayo y ha coordinado los temas relacionados con el uso de cebos envenenados.

Madrid, 03/05/2013. En el marco del Convenio sobre la Conservación de las Especies Migratorias (CMS), expertos de varios países se reunieron la semana pasada para definir las bases de unas directrices comunes que logren reducir el impacto del envenenamiento en las especies migratorias. Este Grupo de Trabajo ha tenido lugar después de que la Décima Reunión de la Conferencia de las Partes de la CMS aprobara una Resolución alertando del riesgo de envenenamiento de las aves migratorias y acordando la creación de un grupo de trabajo para tratar este grave problema.

Tal como ha quedado reflejado en las deliberaciones del Grupo de Trabajo, el origen del envenenamiento de las especies migratorias se encuentra en la utilización de sustancias como los insecticidas, los rodenticidas, algunos productos veterinarios, el plomo y el uso de cebos envenenados. Estas fuentes de intoxicación han sido tratadas específicamente en cinco grupos diferentes que han profundizado en las principales vías de estos envenenamientos, las necesidades de información adicional para conocer la dimensión de este problema y las posibles soluciones para reducir el impacto producido.

Cebos envenenados

SEO/BirdLife ha presentado un documento sobre la situación del veneno en España en el que se recoge la actividad de las principales entidades españolas implicadas en la lucha contra el veneno entre las que cabe destacar la Junta de Andalucía, el Cuerpo de Agentes Rurales de Cataluña y el programa Antídoto. SEO/BirdLife, que coordina el proyecto europeo Life+ VENENO para disminuir el uso de veneno en España, ha sido precisamente la organización encargada de dirigir el grupo específico sobre utilización de cebos envenenados en la reunión internacional de Túnez. Este grupo ha señalado en su conclusiones la importancia de recopilar información sobre los episodios de veneno que se producen en el medio natural y la obligación de que las partes lo comuniquen a la Secretaría del la CMS.

Además, se apuntó la necesidad de sensibilizar a los principales sectores implicados (cazadores, ganaderos, ONG, Administraciones Públicas, agentes, jueces y fiscales, etc.) y llegar a la celebración de acuerdos de colaboración entre ellos. Por último, los expertos reunidos estaban de acuerdo en la importancia de capacitar a los agentes encargados de investigar el uso de cebos envenenados y de crear un marco legal suficiente que considere la gravedad de estos actos, sancionándolos dentro del ámbito penal.

David de la Bodega, coordinador del Proyecto Life+ VENENO y del grupo específico sobre cebos envenenados señala que:”estas reuniones son vitales para la conservación de las aves migratorias, que no conocen de fronteras. Los esfuerzos hechos por muchos países para evitar su envenenamiento no sirven de nada si en otros lugares no se aplican también medidas eficaces para ello”. Y añade que “sólo podemos reducir la intoxicación de las aves migratorias si actuamos conjuntamente en todos los países y etapas de su camino”.

El proyecto Life+ VENENO tiene como objetivo lograr una disminución significativa del uso de veneno en España. El proyecto, con un presupuesto de 1,6 millones de euros, de los cuales la Comisión Europea cofinancia el 40% y la Fundación Biodiversidad el 26%, se desarrolla entre 2010 y 2014.

SEO/BirdLife, el Fondo para la Conservación del Buitre Negro y la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha son los beneficiarios del proyecto. Los cofinanciadores son el Cabildo de Fuerteventura, la Junta de Andalucía y el Gobierno de Cantabria. La Editorial América Ibérica colabora con el proyecto y otras doce comunidades autónomas y un cabildo participan en diferentes acciones.